BIO
Nacido en Pamplona en 1982, Germán San Martín es actualmente uno de los teclistas habituales de los escenarios en la escena rock. Su nombre ha sido asociado en los últimos años a artistas como Annie B Sweet y Russian Red, y desde 2012 a uno de los grandes iconos del rock nacional, El Drogas, con el cual ha colaborado en grabaciones y directos de sus 5 últimos álbumes.
+ INFO
Germán comienza con sus estudios de piano a los 6 años, cursa grado medio de piano clásico en el conservatorio Pablo Sarasate de Pamplona, y se especializa en armonía jazz e improvisación con profesores como Mikel Gaztelurrutia, Mikel Andueza o Iñaki Askunze.
Empieza a tocar en directo allá por 2002 con Kerobia, grupo del cual es fundador y compositor en sus 2 primeros discos.
Gran admirador de teclistas como Lee Pardini, Gregg Allman, Chuck Leavell o Billy Preston, se especializa muy pronto en los sonidos de teclas vintage tales como pianos eléctricos (Fender Rhodes, Wurlitzer), sintetizadores (Moog, Prophet) así como órgano Hammond, destacando su faceta como músico de rock, folk y blues principalmente en los artistas a los que ha acompañado.
Durante los últimos 20 años ha colaborado con más de 30 bandas y ha tenido el gusto de acompañar en directo a artistas como Brian Hunt, Cabriolets (Bimba Bosé), Souvenir, Muy Fellini, Alex Ferreira, 84 o Tulsa.
En 2018 se une a Con X The Banjo, banda con la que ha hecho más de un centenar de conciertos y participado en sus 2 últimos álbumes; con Alejo Huerta al frente, con el cual estará embarcado durante 2022 en la presentación de su primer LP.
PROYECTOS
12 NANAS PARA MATTHEW
Cuando éramos novios y soñábamos en alto con un hogar común, una de las cosas que siempre me decía Andi es que le gustaría que tuviésemos un piano en nuestro dormitorio, para que sonasen canciones un ratito antes de dormir y otro ratito al amanecer.
Esas silenciosas tocatas dieron lugar a un puñado de canciones con aires de música popular, melodías sencillas y agradables.
Cuando nuestro amor dio lugar al pequeño Matthew, esos sones de dormitorio mudaron piel a nana. Una en cada tono para recorrer con sigilo los rinconcitos que dejan las teclas negras a las blancas.
12 NANAS PARA MATTHEW
Cuando éramos novios y soñábamos en alto con un hogar común, una de las cosas que siempre me decía Andi es que le gustaría que tuviésemos un piano en nuestro dormitorio, para que sonasen canciones un ratito antes de dormir y otro ratito al amanecer.
Esas silenciosas tocatas dieron lugar a un puñado de canciones con aires de música popular, melodías sencillas y agradables.
Cuando nuestro amor dio lugar al pequeño Matthew, esos sones de dormitorio mudaron piel a nana. Una en cada tono para recorrer con sigilo los rinconcitos que dejan las teclas negras a las blancas.
EL DROGAS
Una tarde de otoño de 2012, recibí la llamada de Enrique (recuerdo –‘¡Aúpa Germán! Soy El Drogas’) para colaborar en el disco que tenía en mente, porque quería vestirlo con canciones con tintes the rhythm & blues y puro glam.
Grandes músicos alrededor de un gran artista, que terminan conformando una gran familia, y confirman lo que dice Fito Cabrales en su documental: Enrique se rodea de gente buena.
A día de hoy, cuatro discos después y unas cuantas docenas de melodías, riffs y kilómetros en el camino, sigo alegre y agradecido de formar parte de esa familia, y recordando esa llamada recibida con especial afecto.
ALEJO / CON X THE BANJO
2018, Festival Tram Tram, salieron a escena con esa frescura y ese respeto que siempre identifica al artista elegante y humilde. Fue verles y sentir ‘quiero eso’, proponernos ‘¿tocamos?’ y hasta hoy.
Alejo plantea un formato de canción muy interesante, con componente lírica, melódica y armónica de ecuación completa; adecuada e intelectual para el piano.
Agradecido por formar parte también de esta otra familia, de compartir vida con mis camaradas Banjos, y de seguir remando con pujanza y cuidando con mimo del arreglo y el matiz desde las teclas.
El respeto a la canción, nuestra máxima.
ALEJO / CON X THE BANJO
2018, Festival Tram Tram, salieron a escena con esa frescura y ese respeto que siempre identifica al artista elegante y humilde. Fue verles y sentir ‘quiero eso’, proponernos ‘¿tocamos?’ y hasta hoy.
Alejo plantea un formato de canción muy interesante, con componente lírica, melódica y armónica de ecuación completa; adecuada e intelectual para el piano.
Agradecido por formar parte también de esta otra familia, de compartir vida con mis camaradas Banjos, y de seguir remando con pujanza y cuidando con mimo del arreglo y el matiz desde las teclas.
El respeto a la canción, nuestra máxima.
KEROBIA
Año 2001. Éramos jóvenes, no sabíamos prácticamente nada y eso hacía que el miedo a las circunstancias fuese directamente proporcional a dicho conocimiento. Es decir, cero miedo.
Me encontré con Xavi en los aledaños de la facultad, me dijo que tenía ideas, nos dijimos: ‘a tocar’, nos sentamos a componer y empezaron a pasar cosas.
Kerobia hizo lo que sentía; sonó, cantó y hubo gente a la que eso le emocionó.
Fue una experiencia musical muy enriquecedora, con la cual aprendí y en la que pude volcar mis sentimientos, mis composiciones y mis emociones a través del piano.
KEROBIA
Año 2001. Éramos jóvenes, no sabíamos prácticamente nada y eso hacía que el miedo a las circunstancias fuese directamente proporcional a dicho conocimiento. Es decir, cero miedo.
Me encontré con Xavi en los aledaños de la facultad, me dijo que tenía ideas, nos dijimos: ‘a tocar’, nos sentamos a componer y empezaron a pasar cosas.
Kerobia hizo lo que sentía; sonó, cantó y hubo gente a la que eso le emocionó.
Fue una experiencia musical muy enriquecedora, con la cual aprendí y en la que pude volcar mis sentimientos, mis composiciones y mis emociones a través del piano.